miércoles, 26 de mayo de 2010

Carrozas de fuego


Hay que decirlo: te cae el Bicentenario en pleno gobierno delruista y nos morimos del sopor, con suerte se consigue un canje por dos temas de Shakira pero pará de contar. A la Presidenta, en cambio, critíquele cualquier cosa, pero ella nunca tendrá que hacer un spot publicitario mascullando “Dicen que soy aburrida”.
No.
Mi familia está en tema desde hace meses, cuando Cari ingresó al elenco estable de los constructores de carrozas y desde entonces hemos dedicado buena parte de nuestras sobremesas de sábado a debatir cuánto merecía cada tema ser conmemorado, qué personajes ameritaban ese privilegio, qué episodios valía la pena evocar.
Nos quedamos cortos, señor. Nunca hubiéramos soñado nada como lo que vimos. No se lo cuento porque ya lo vio en la tele (tan espectacular que hasta se vio en la tele, y no sólo en ATC), pero déjeme reproducir algunos coments de mis hijos.

Yo, mientras baño a Fidel: ¿Sabés? Vamos a ir a un lugar re lindo, con carrozas, música, luces.
Fidel (a los gritos): ¡Cuca! ¡¡¡Nos vamos a Disney!!!

Cuca, en pleno desfile, mientras pasa con sus dragones la columna que representa a los inmigrantes de China: ¡¡¿¿Son chinos de verdad??!!

Cuca, en el auto de vuelta: Lo único que no estaba igualito fue lo de las madres: no parecían las verdaderas.
Yo: …
Cuca:…
Yo: …
Cuca: Ah, porque antes no eran viejitas…

Ay, mi negra, qué genia sos.

By the way, hubo Paquetito Paquete Patrio para Patricia (dígame si no está para patentarlo) y para Pilar, que tuvo su primer protagónico como dama antigua en el cole.
A mí, ya le dije, me encantó todo, pero algo de lo que más me conmovió fue el grupito de travestis que bailaba entre las murgas, moviendo las colas de gatos que le salían del catsuit. Me llenó de emoción imaginar una señora pacata atragantándose con un canapecito ante semejante espectáculo, “Ay, Joaquín, esto en Miami no pasa”. A mí me fascina que pase, ¿para qué mentirle? Las perdices son así.

No hay comentarios:

Publicar un comentario