miércoles, 29 de diciembre de 2010

Maratónica navidad

La noche del 23 al 24 ni me acosté, seguí de largo para terminar con los pedidos navideños. Hubo hermosísimas repercusiones, al menos. Aquí fotos de las mesas, y los paquetitos de cupcakes, galletitas, shots.


Entropía


Dijimos "Cena íntima más baile" pero como en mi familia somos mil y para peor nos queremos lacenaíntimamásbaile devino sin que nadie supuiera bien cómo en una fiesta multitudinaria. Con el borrador de la lista de invitados fuimos a la galería de arte que elegimos para la ocasión y contamos nuestra idea. A los dueños les encantó; armamos junto con ellos el menú y aceptamos la sugerencia de dar paso de la cena al baile con un brindis. Pensamos en una torta para el brindis. Ahora claramente la hubiera hecho yo pero por aquella época no sabía hacer nada, así que también la encargamos. Nos preguntaron "¿Con tiritas, no?" y yo dije "Obviamente". Después fui por un vestido. Quería algo corto y colorido, pero el diseñador dijo que yo era la reina de la noche (qué intuitivo) y terminó siendo largo y blanco. Los invitados comenzaron a preguntar dónde habíamos hecho lista de regalos así que finalmente hicimos una con la que conseguimos todo lo que nos fascinaba pero que nunca hubiésemos comprado para nuestra casa. Cari me preparó un ramo de flores naranjas que durante la fiesta arrojé a las solteras y atrapó mi prima Mercedes (que anunció su separación pocos días después); no hubo vals, pero durante el brinds alguien puso "Noches de boda" y allá fuimos todos.
Unos días antes me habías citado a un bar sin decire para qué. Anunciaste una sorpresa y yo estaba segura de que me llevarías al partido despedida de Maradona ("La pelota no se mancha"). Casi me decepcioné al ver que el taxi no rumbeaba hacia La Boca sino hacia un barrio desconocido, y se detenía frente una casa en la que no había estado nunca. Nos recibió un hombre que nos hizo pasar a su taller, y por un instante creí que era un pintor. Pero era orfebre, y le habías encargado las alianzas. Necesitábamos algo que representara el hecho de que no íbamos a casarnos, porque queríamos algo que representara que nos elegiríamos día a día. Si la alianza tradicional es un bloque sólido que representa la promesa de estar juntos toda la eternidad, queríamos algo que mostrara nuestra elección de una elección cotidiana. El orfebre hizo dos anillos unidos por una bisagra, con una pequeña astilla de oro rojo que sólo coincide si las dos arandelas se superponen.
El 22 de diciembre hizo nueve años que llevamos ese anillo, pero ¿sabés qué? es mentira que no estamos juntos por algo que no se encuentra en el pasado. Si permanecemos juntos es por esa vez en que le dijiste a toda la clase que nadie podía hacer su trabajo a mano salvo esta chica (yo) que tiene una letra preciosa; es por el atardecer en que nos econtramos en el muelle de esa isla remota y por el solero azul que me puse para cenar con vos esa noche en el patio de un restaurant poblado de conejos; es por la mañana en que nos quedamos encerrados del lado de afuera de nuestro departamento de Vidal con el agravante de que yo estaba completamente desnuda, y fuiste a conseguir una copia de la llave mientras me quedé escondida en el incinerador de nuestro edificio; claro que también importan las pastas de Gianni´s y lo que caminé para conseguir el ejemplar cubano del libro de Halperín Donghi que se me antojó traerte de regalo, y ese llamado salvador en una mañana lúgubre de Amsterdam; y claro, cómo no, las dos líneas celestes, celeste también tu cofia ("no tengas miedo, no tengas miedo"), las manos entrelazadas en esa noche del Malba, y en la fiesta de egresados de Cuca en el jardín, y en la puerta del quirófano con Fidel, las fotos de Permiso junto a Cortázar, la raclette, el pan hueco relleno de queso derretido de nuestra vecina catalana, la cara que pusiste cuando entraste a nuestra habitación y era naranja, las correciones a El Sentido, los pies negros de los chicos en el sillón, una trasnoche pesadillezca en Skype, los cuadros de María y la cena de ayer en Ravé, tan parecida a la primera que te lo dije: El mozo debe creer somos novios. Me encanta que sea así.
Aquel diciembre al teminar nuestra fiesta un taxi nos llevó al albergue transitorio de barrio que habíamos elegido para nuestra noche de pseudo bodas. Entré arrastrando la cola de mi vestido blanco y una parejita que esperaba para pernoctar y el encargado no podían creer lo que estaban viendo. Creerían que habías secuestrado a la novia. Pedimos la llave y subimos a nuestra habitación, tan seguros de nostros mismos por no haberle jurado nada a nadie, por no haber pronosticado que seríamos felices para siempre sino por encontrar en el tiempo compartido, y en el que vendría después, tantas buenas razones para intentar una panzada de perdices, con la certeza de que eso que ocurría al estar juntos era lo más parecido que conoceríamos en nuestras vidas a cualquier forma de felicidad.

martes, 28 de diciembre de 2010

Yo creo en las hadas (creo, creo), bis.


De hadas, pedidas por Luciana para el cumple de Amparo.

Hablando de abuelas...


...torta para la de Bernarda, Jose y Juanita.

34

Hasta que murió mi abuela Blanca, todos los 15 de diciembre del mundo empezaban con mis abuelas regocijándose en la anécdota de mi nacimiento, con el habitual destacado: peluda hasta la médula. Yo jugaba a renegar de aquel cuento pero la verdad es que me gustaba, mitad por verlas a ellas divertidas y mitad porque tampoco es que abunden los testigos del día en que nací.
Cumplir años me encanta. Me convocan los festejos en general y particularmenete este, en el que decido con puntillosidad la lista de invitados (el elenco estable más las periódicas revelaciones), la comida (todo lo salado a cargo de mi abuela Esther con el aporte de Cari, todo lo dulce perdiz), la bebida, la música, la decoración.
Aquí algunas fotos de los festejos adroguenses, el mismo día, por la tarde, con abuela, tíos, primos, sobrinos adorados, todos reunidos en torno a mis mil velas posadas en una torta de base de brownie y relleno de mousse de frutilla y chocolate blanco; y de la fiesta del sábado, con torta estrellada y shots surtidísimos para que cada uno elija su combinación más feliz.


domingo, 19 de diciembre de 2010

"Are you ready for Elmo?"...




...preguntó Daniela, y la respuesta fue así.

Mi otro yo


Mi otro yo tenía una cena de fin de año con sus amigos sociólogos y afines, así que preparamos esta torta de base de brownie, relleno de mousse de chocolate y cobertura de arándanos ¡Hicimos estragos!

Gloriosos


Shots de arándanos, para brindar con amigos.

La granja de Santi


Todo pensado por mamá Romina.

La princesa y el sapo


Todo divino y pensado por mamá Marina, para el cumpleaños de Ana.

¡Bienvenidas, vacaciones!







Trufas para Jopina que termino el cole para siempre, torta para el desayuno de fin de clases en la sala de Fi, y arbolitos de galletita para que Cu comparta con sus amigos en la despedida del año.

Musical y chocolatosa...


...para el cumpleaños de Andrés.

"Amoooo cumplir años"


Ese fue el título del pedido de Julia, y nada podría resumirla mejor. Aquí la foto de los dulces con que festejó como loca, menos de las galles porque no les saqué :(

Que todas las noches sean noches de boda




Todo para el aniversario de los tíos de Candelaria.

Chau cole
















Galletitas para regalar por el fin de año por tonelada, pedidas por Paula, por Tania, por Florencia.

Trópico de Sagitario




Una vez me contaron un chiste en el que se preguntaba qué razones tenía cada signo para cruzar la calle. Por ejemplo: virgo para llevar la contra, etcétera (mi ignorancia sobre este rubro me impide profundizar con los ejemplos...). De sagitario decía: Porque sí, porque le pareció divertido.
Así somos los sagitarianos, señora, y ni le cuento si se trata de festejar. Y Carina es un genial exponente, siempre con sus celebraciones descomunales. Aquí van las fotos de los combos de este año, ¡porque sí!


Festejito gourmet para Malena




Egresaditos


Pedidos por Florencia, para que su hijita se despida del jardín.

Madre esmerada


Encargó los adornos, pero la torta es obra de ella: ¡Grande Ana!

De bautismo


Para el bautismo de Kurt, íntimo de Fi.

Amigas




Este post es para mis amigas: ¡¡¡miren las cosas que encarga Mónica cuando se junta con las suyas a tomar el té!!! Genia total, en principio por juntarse. A que imitarlas.

Kai


Surtidito marítimo para el cumpleaños de Kai.

La profecía oculta de Nostradamus







Cuca nació el mismo día que Fabi, pero mi fecha probable de parto fue el 9 de mayo desde el día cero. Pablo y Silvia esperaban a Cata para enero, pero el 1 de diciembre de 2003, cuando nos preparábamos para la cena de cumpleaños de él , tuvimos que cambiar de rumbo para el sanatorio, porque la bebé se había adelantado. Pablo es elmejor amigo de Fabi ¿se entiende? Con siete meses de diferencia Fabi y Pablo tuvieron a sus respectivas hijas el día de su cumpleaños ¿no le parece estremecedor? Por lo pronto, mientras lo pensamos, nos atracamos de dulces, en la maratón de festejos que ameritan ocasiones así. Aquí fotos de algunos de ellos, porque además Cata es nuestra ahijada! así quesus festejos siempre vienen con sello perdiz.

Zalil Ha


Paula es una clienta tan tan perdiz que hasta ganó el concurso de foto del primer aniversario de CP cuando su hermana se sumergió en un xenote mexicano

con un pez de galletita. Ahora trabajan juntas importando pilchitas yucatecas como las que se ven en estas galletitas, bajo el sello Zalil Ha. Las encuentran en facebook, ideal para esta navidades...

Abi


Personalizadísimas, pedidas por Violet.

León x 2




Pedidos por mamá Tania para el cumpleaños de León: souvenirs arácnidos para los festejos en el jardín de infantes y torta de Oso Agente Especial (¡esta vez con los recaudos del caso para que no se alborote el gallinero!).

Surtidito violeta :)


Tecito


Delicado, meditado, especial: té perdices encargado por Ana para su mamá.

jueves, 25 de noviembre de 2010

Fiestas, qué fantásticas, fantásticas, las fiestas







Llegó la hora, señora: el broche de oro, la frutilla del postre, el cierre estelar. A pasitos nomás de diciembre el olor infalible de los jazmines remite a navidades adroguenses, la prolongación de los días intensifica el lazo social cual lo firmaba Durkheim y cual se huele en los asados que de pronto asoman cuando asoma la noche, el calor acerca unos fervores veraniegos a los que además da forma y color.

Y entonces por qué ¿por qué, me pregunto yo, uno va en ojotas por la calle y al mirar una vidriera no ve olas de mar sino copos de nieve? Entiendo que este señor llegará del Polo Norte, pero la manía de importar descerebradamente cualquier cosa me sulfura (¿o me sulfata?). El año pasado la resistencia perdiz planteó un cambio de sabores: dejemos lo navideño en la decoración y abandonemos los bodoques de masa seca y perfumada para optar por sabores más frescos. Este año vamos por más. Si bien nunca llegué a abdicar ante galletitas en forma de mitones de lana en esta ocasión el Papá Noel perdiz se saca toda la parafernaria y se queda en bermudas, ¡¡¡En zunga si usted me lo pide!!! Pídamelo y se lo desnudo. No es un arranque de nacionalismo sino de sensatez; no es una campaña contra el comercio internacional de adornos para árboles de otro hemisferio sino la llana intención de disfrutar algo que tenga que ver con algo y nada que remita a la nada.

Dicho lo cual, he aquí la propuesta de mesa dulce perdiz navideña y añonueveña:

-shots de mousse de naranja y mousse de chocolate

-brownies con copete de merengue

-tarteletitas de cheese cake con cereza

-tarteletitas de frutas secas

-cupcakes de dulce de leche con buttercream

-galletitas con formas navideñas y deseos personalizados

Para seis personas: $ 220

Para doce: $ 420

Y así susesivamente.

Además Paquetitos Paquetes de 12 galles $ 70 y clones de los asistentes a los festejos en bolsas individuales $ 6 each.

Fiestas frescas y deliciosas, hermosas y personalizadas, que hablen de nosotros, que tengan algo que ver con los que devoran y comparten, que leen sus deseos y se ven a ellos mismos hechos de masa, que brindan con mousses, que se chupan los dedos, que saben que un buen comienzo requiere antes de un mejor final.

Guarangada


Señora, ¡esto más que una chocuqueta es una guarangada! En verano pida sus tortas con cerezas, síííííí

¡Ositos!

Para Carolina, pedidos por Ana que está en todo.



martes, 23 de noviembre de 2010

Rosa y radiante va la novia




Torta, galles, cupcakes y trufas para el cumpleaños de Guillermina, con todas las fichas puestas en elmegaevento del verano:D

Mais de hadas


Otra versión de una torta solicitadísima (atenti, señora, esta está rellena de mousse de chocolate).

Uno y uno






Todo para el cumple de Benicio, objetivamente pequeño, y todo para el cumple de Juliana,que promedia los veinti pero siempre será la niña de la mamá a cargo de este pedido.